Abolición de la Esclavitud y Liberación Animal
Por FabiolaEl 2007 se cumplirán 200 años de la firma de la primera acta que marca el comienzo del fin de la esclavitud: el 24 de marzo de 1807, el parlamento inglés firmó por el fin del comercio de esclavos en sus colonias. Hoy, tras 200 años, hemos visto caer la esclavitud colonial de los negros, pero el problema persiste, disfrazado como trabajo infantil, mano de obra inmigrante barata, comercio sexual de mujeres... En este escenario, pensar la liberación animal es complejo, pero no imposible, si somos capaces de ver la real conexión existente entre la esclavitud humana y la esclavitud a la que son sometidos los animales en las diferentes áreas de producción.
Esclavo según la RAE es "una persona que carece de libertad por estar bajo el dominio de otra". El régimen de propiedad que tenían y bajo el que vivían los esclavos al ser considerados una "cosa" u "objeto" determinó la total y sistemática violación de sus derechos más fundamentales. Cuan objetos eran secuestrados de su tierra y llevados allende el océano, en torturantes y calamitosos viajes por mar que terminaban diezmándolos por el hacinamiento, las pésimas condiciones higiénicas y las enfermedades.
Según un dossier dedicado a la esclavitud publicado por la BBC:
En un periodo de 300 años, más de 10 millones de personas fueron tomadas y transportadas desde África hacia América para trabajar en las haciendas coloniales. Se calcula que al menos dos millones de ellas murieron de hambre, hacinamiento o enfermedad durante esa travesía.
Asimismo tratamos hoy en día a los animales no humanos, esclavizándolos y sometiéndolos al maltrato derivado de su condición inferior de "cosa" u "objeto", a merced de la total y absoluta potestad de su "dueño", que puede hacer con ellos lo que les plazca. De esta manera, los esclavizamos, nos adueñamos de ellos, los compramos cuando nos da el capricho y asimismo los abandonamos cuando están viejos, enfermos o nos aburren; los torturamos, los sacamos del campo para encerrarlos, engordarlos en tiempo récord, matarlos y comérnoslos; los perseguimos y los secuestramos de su hábitat -de sus comunidades, de sus familias- para encerrarlos y sacarles su piel, para vender sus órganos, para experimentar sustancias en ellos, para mirarlos "cómo son de bonitos, cómo son de salvajes"- condenándolos a una vida de miseria, dolor y cautiverio.
Esos esclavos no humanos, tienen tanto en común con los esclavos humanos, que los único que los diferencia es que mientras éstos pueden hablar un idioma comprensible para el ser humano; aquellos no pueden verbalizar, pero si que nos dan muestras de su dolor: mugen, gruñen, lloran, se automutilan, se dejan morir de sed o hambre; se resisten a los malos tratos, gritos, insultos y golpes de sus cuidadores, a la cuchilla del matarife, a la inyección del investigador, a la celda del zoo o del circo...
Pensar en los motivos que llevaron a la abolición de la esclavitud es evidenciar el avance ético moral de la sociedad que fue capaz de mirar la aberración de la esclavitud y decir ¡basta!: los seres a que esclavizamos son personas como nosotros, dignos de respeto en virtud de su humanidad, sensibles al dolor y sufrientes por su cautividad. Pensar en este mismo motivo y desear el advenimiento de una nueva fase en que la sociedad avance ética y moralmente; es por lo que estamos inspirados y trabajamos concretamente para conseguir el reconocimiento de los animales no humanos: ellos también sufren, también sienten y son dignos de consideración moral no sólo porque sienten -ni por cuánto se parecen a nosotros los animales humanos-. Ellos merecen respeto y consideración en virtud de su existencia como seres autónomos, completamente conectados en su animalidad con la naturaleza. Ellos desean vivir su vida de la mejor manera posible; y el estatus de propiedad que -como el esclavista- les conferimos, deberá caer algún día por el peso de sus circunstancias.
No podemos sostener la economía, la ciencia, la cultura, en una sistemática y persistente violación de los derechos animales. Tal como un día se abolió la esclavitud, se abolirá también la propiedad de los animales humanos sobre los animales no humanos. Y por eso estamos trabajando...
Fuente: Dossier de la BBC "Esclavitud: el comienzo del Fin". Fuente imágenes: BBC, Jean Marc La-Roque Auscape International.