12 Mar 2010

Nueve buenas razones para no comprar animales

Por Fabiola

Traer un animalito a vivir a casa no tiene por qué significar necesariamente comprarlo, ni a un particular ni en una tienda de animales. A veces puede parecer la manera más fácil, pero no es la más conveniente. Existen alternativas más compasivas, solidarias y respetuosas con los animales.

Respecto a perros y gatos que son los compañeros y compañeras más usuales, veamos ...

1.- No apoyes los criaderos intensivos

Los perros y gatos que venden en las tiendas vienen de criaderos o instalaciones de crianza de alto tráfico, donde los animales son mantenidos encerrados (generalmente en jaulas), las hembras pariendo constantemente y sufriendo el arrebato prematuro de sus cachorros para ser vendidos como objetos.

Estos animales, tanto padres como crías, normalmente tienen problemas de salud (debido a las pobres condiciones higiénicas, la deficiente atención veterinaria y la cruza endogámica) y serios problemas de socialización: al ser arrebatados prematuramente de su grupo familiar para pasar a formar parte de un stock, los cachorros pierden tiempo importante de educación de sus madres y de relacionarse saludablemente a través del juego con sus hermanos.

2.- Salva una vida

Es triste, pero cierto: el espacio en refugios y perreras es muy limitado. Si ese gato o perro que viste por internet o visitaste en la perrera no encuentra un hogar pronto, seguramente terminará siendo eliminado por eutanasia. Si bien existen algunas perreras o refugios que no eutanasian, lamentablemente no son mayoría sino una selecta minoría.

3.- No gastes dinero de más

Cuesta mucho menos adoptar un animalito de un refugio que comprarlo de una tienda de animales. Lo que el refugio te cobrará al momento de la adopción incluye la vacunación y desparasitación interna y externa del perro o gato. Si se trata de animales adultos, también te cobrarán la esterilización; y en caso de ser un cachorro te darán un vale de descuento para esterilizarlo/a cuando cumpla los 6-8 meses de edad. Todos estos gastos incluídos siempre costarán mucho menos que el precio del animal en la tienda de animales, porque no hay un ánimo de lucrar con la vida del animal.

4.- No creas que un certificado de raza garantiza buena salud

Los certificados de pureza de raza o de ascendencia no significan que el animal que estás adquiriendo sea sano, ni esté sano. De hecho, si el animal es de pura raza, es seguro que portará consigo enfermedades genéticas hereditarias, producto del cruzamiento selectivo para acentuar algún rasgo propio de la raza de que se trate.

Por ejemplo, es conocidísimo que los perros pastor alemán y gran danés sufren de artrosis y problemas óseos en las caderas, que los bulldogs de todo tipo, así como los gatos persa sufren de problemas respiratorios. Además, siendo honestos, hoy en día son tiempos en que incluso los animales de raza son abandonados, y muchas personas se asocian para atender las necesidades de razas específicas y les dan en adopción, como en el caso de España las asociaciones SOS Golden, SOS Galgos, etc.

5.- Si lo prefieres, encontrarás animales de raza en refugios

Si estás realmente prendado de alguna raza en particular, lamentablemente los refugios y perreras también tienen entre sus huéspedes a animales de raza, esos gatos y perros de las razas de moda que fueron una molestia para uno que se gastó un dineral en su compra, y luego lo abandonó.

6.- Fomenta que los animales estén socializados

Los animales en los pet shops, con toda seguridad, nunca han sido socializados por la misma naturaleza del negocio. Por el contrario, la mayoría de los refugios y protectoras de animales conocen las historias de sus animales abandonados, conocen su comportamiento y sus manías, con lo que podrán ayudarte a escoger al animalito más apropiado para tu situación de vida. Ellos conocen a sus animales, sus personalidades y necesidades, en circunstancias que una tienda sólo desea vender más y más animales. La gran mayoría, si no la totalidad de los animales de un refugio, son víctimas del abandono, han vivido en casas y saben cómo manejarse en un entorno humano. Ciertamente serían felices teniendo una segunda oportunidad.

7.- No contribuyas a la sobrepoblación

Existen tantos, ¡tantos perros y gatos abandonados que necesitan un hogar! Las tiendas de animales y los kennels comerciales sobrexplotan a sus animales por el mero provecho económico. Sólo en Estados Unidos se eutanasian (asesinan) de 6 a 8 millones de animales por año. Adopta un animalito esterilizado y dale esa segunda oportunidad que, si a tí te abandonaran, también te gustaría tener.

8.- Encuentra un compañero diferente

Porque rescatan no sólo perros o gatos. También podrás encontrar tortugas, aves, caballos, burros, hamsters, reptiles, conejos y todo tipo de animalitos que han sido ya abandonados, e incluso, maltratados.

9.- Adopta a distancia si prefieres

También tienes la posibilidad de convertirte en "padrino"  si vives en un lugar muy pequeño, o tus condiciones de vida no te permiten vivir con un animalito. La gran mayoría de refugios y protectoras ofrecen esta opción de apadrinamiento, con la que podrás apoyar económicamente la manutención de tu ahijado, y visitarlo, pasearlo y darle tu cariño cuando puedas.

Fuente imágenes: Michelle Riley (HSUS), Paul Goyette.